viernes, 23 de mayo de 2014

30. Voces directas de radio.

Existe un término dentro del argot de la TCI y es el de "voz directa de radio". Se trata de la opción más desarrollada en la que llegamos a una conversación en tiempo real con estos "extraños" interlocutores a través de nuestro receptor de radio sintonizado o no. Pero vamos a profundizar más en este concepto.
  • Desde prácticamente los comienzos de la investigación parafónica existió el anhelo de poder desarrollar comunicaciones fluidas en las que no existiese la barrera del "a posteriori", es decir, lograr comunicaciones en directo sin la necesidad de análisis precedente se convirtió en un reto para los investigadores. Friedrich Jürgenson junto al letón Raudive invirtieron un gran esfuerzo en la actualización de los procedimientos técnicos con el fin de lograr la comunicación en directo. ¡Y lo consiguieron!
  • Después, en Europa Central, esos procedimientos se mantuvieron y mejoraron  (sobre todo en Alemania y Luxemburgo) comenzándose a obtener infinidad de comunicaciones bis a bis entre el interlocutor y el receptor. 
    El camino para lograr las codiciadas comunicaciones en vivo era una evidencia. (Para conocer más sobre la historia de la TCI le recomiendo descargar en su dispositivo la entrevista que realicé a Anabela Cardoso en la que comenta brevemente la historia de la TCI en Europa)
Estas dos aclaraciones históricas son importantes principalmente porque el término "voz directa" es desconocido entre el gran público en general y los experimentadores en general.
Esto puede ser debido a la preponderancia de la denominada "psicofonia"; en general prestamos únicamente atención a los registros grabados en nuestros soportes y que escuchamos y analizamos con posterioridad. Dentro de la dificultad que supone el registro parafónico hay que decir que ésta es la opción más fácil. Obviamente, y ya lo he comentado en alguna ocasión, la finalidad de la TCI es la COMUNICACIÓN.
Por lo tanto grabar parafonía y escucharla a posteriori ralentiza enormemente la comunicación.

Hay que tener claro que el registro de voz directa es muy complicada de obtener. Por un lado existe la dificultad de dicción. En ámbitos generales nos creemos que con el mero hecho de utilizar ruido blanco o una onda portadora X vamos a entablar contactos con estas voces directas. No se engañe, es un trabajo arduo, difícil y muchas veces insatisfactorio. Recomiendo antes de nada empezar con la grabación parafónica tradicional, es decir, la que analizamos y percibimos con posterioridad y poco a poco ir buscando frecuencias (generalmente ruido blanco entre estaciones de onda corta) en las que con mucha paciencia y educando el oído podamos entablar comunicaciones en vivo.

Comenté en alguna ocasión que la búsqueda manual que proponía König es básica. Lo sigo manteniendo. Usted deberá buscar las frecuencias por si mismo. Es imposible extrapolar modelos de frecuencias válidos para todos los investigadores. Ya sabe que las frecuencias van cambiando paulatinamente a lo largo del día y que el factor meteorológico y geográfico tiene mucho que ver. Por lo tanto usted será quien en base a su experimentación deba descubrir las frecuencias propicias.
En su día cometí ciertos errores de frecuencia en los que utilizaba ondas cortas por ejemplo en lengua francesa. No recomiendo usar lenguas románicas por su similitud con el castellano. Tanto en voz directa como a posteriori tenemos el peligro de interpretar automáticamente unas palabras como propias de nuestra lengua. Ya sabe que en muchas ocasiones nuestro cerebro nos engaña inmisericordemente.

Habrá notado que hago (hacemos) una distinción entre voz directa y registro parafónico tradicional, pero esta distinción no es tal. Ambos son registros parafónicos intrínsecos por su propia naturaleza desconocida. Lo único que podría variar a parte de su nomenclatura es el uso de la portadora. La voz directa podríamos catalogarla como "voz electrónica" o EVP en inglés. En cambio el registro parafónico tradicional no tiene porque nacer necesariamente de una portadora hertziana (ya hemos visto que podemos utilizar por ejemplo ruido ambiente,es decir, onda acústica o cualquier otra fuente de ruido favorable). En resumidas cuentas, ambas son registros parafónicos.

Me resultó curioso cuando Cardoso me comentaba su praxis: ella nunca usa onda portadora con voz y tiene sus razonamientos. Argumentaba la posibilidad tanto de intromisión como de pareidolia. Y es totalmente cierto. Aún así he de decir que la mayoría de experimentadores trabajamos con éste método y, a priori, es complicado caer en error. Recomendaba usar por ejemplo un soporte previamente grabado con una locución en onda corta mediante la que pueda compararse con posterioridad. Es una opción acertada y que usted puede usar.
Aún así incido:  puede usar locución siempre y cuando tenga controlados los parámetros de recepción.
Existen además ciertas particularidades que, aunque no sean extrapolables a todos los casos ni muchísimo menos, si son en cierta forma paradigmáticas. Y me refiero a un detalle que traté en el punto 24 cuando escribía sobre las características de las voces: el vacio acústico.
Es curioso, e incido, como en algunas ocasiones tanto en el uso de onda acústica como hertziana aparece un silencio de la onda portadora para después aparecer el supuesto registro parafónico. ¿Es una muestra de la naturaleza paranormal del fenómeno? Como siempre digo, por si misma no. Ahora bien, la conjunción de factores es lo que nos permite sacar ciertas conclusiones que nunca deben de ser demasiado entusiastas.

Finalmente y llegado a este punto me surge una duda: ¿entramos en contacto con un "canal" o bien, desde un punto de vista más espírita, las inteligencias que nos rodean usan ese soporte hertziano para comunicarse directamente? La respuesta es imposible de afirmar, sólo podríamos elucubrar. 


2 comentarios:

  1. Buen entrada. El método transradio utilizando como onda portadora la de una loción humana en un idoma muy diferente al nuestro como el alemán, chino, árabe, no está exenta de malas interpretaciones como pareidolias. Hice una pequeña investigación al respecto, cogí una entrevista en alemán, troceé cada palabra aleatoriamente con un software específico para ello como es el EVPMaker. Luego con un editor de audio, mezclé toda esa amalgama de vocablos aleatorios incomprensibles, con la misma entrevista, dando prioridad de volumen a los vocablos troceados. Luego lo grabé en un CD. En definitiva, tenía toda una mezcla de sonidos incomprensibles que podía usar como portadora. Luego reproduje eses CD por un altavoz y grabé el mismo mientras hacía preguntas. Resulta que pude hallar respuestas en toda esa mezcla. Evidentemente eran pareidolias ya que pude comparar el CD original con la grabación utilizada. No significa eso que siempre se produzca el fenómeno pareidólico, pero es probable.
    También es conocido el fenómeno de interpretación falsa en otros idiomas. Que también se conocen popularmente como momentos teniente, Aquí un ejemplo;
    https://www.youtube.com/watch?v=xYKof4tYSmc
    Es por ello, en lo puristas que tenemos que ser cuando utilizamos algún método que requiere reproducción de voz humana.

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  2. Antes de nada agradecerte tu comentario.
    Como bien comentas la pareidolia es un riesgo que siempre acecha al experimentador. Eso es evidente y además es muy difícil de controlar. También es cierto que en ocasiones pueden colarse ondas residuales en la frecuencia que estamos utilizando. Aún con todo eso, lo cierto es que el porcentaje entre acierto y error es abismal entre uno y otro. Por supuesto que hay errores,fallos, intromisiones, pareidolias etc, pero reducirlo todo a eso sería en cierta forma "injusto".
    Otro dato, si yo hago una pregunta con una posible respuesta "rebuscada" sin conocer dicha respuesta a priori y obtengo un registro claro, obvio, contextualizado y que además se dirige a mi por mi nombre y sabe detalles personales o íntimos pues.... algo raro hay. En fin... es complicado tratar este tema.

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