viernes, 30 de mayo de 2014

31. Deformación de la investigación parafónica.

Llevaba tiempo merodeando por mi cabeza la necesidad de plasmar en un post  ciertas investigaciones que llevo años observando no sólo en internet sino en núcleos más cerrados de investigación y que no siempre pasan a la red de redes.
Antes de nada, y con su permiso, quiero advertir, informar, puntualizar y subrayar que bajo ningún concepto intento dinamitar,juzgar,denostar,menospreciar o hacer algún tipo de crítica airada sobre el trabajo de otras personas. Una vez dicho esto comienzo.

  • Afortunadamente la nueva era tecnológica en la que todos estamos inmersos nos da pie a expresarnos, compartir y conocer otras experiencias con personas de cualquier índole, creencia, credo, procedencia y nivel formativo. Sé que esto es una obviedad, pero realmente es el punto primigenio de todo lo que escribiré a continuación. En adición, es una muestra de libertad individual y colectiva poseer la opción de informar sobre lo que queramos, cuando, donde y como deseemos; eso sí, guardando unas mínimas muestras de cortesía, respeto y empatía hacia nuestros semejantes. 
    En conclusión: todo ciudadano tiene el derecho a expresar lo que le venga en gana dentro de unos cauces normales y lógicos. Y aunque esto parezca algo, repito, demasiado evidente, no todos los países tienen esa libertad de información de la que yo o usted poseemos.
    Como dueños y soberanos de esa libertad individual tan estudiada por la filosofía moderna, podemos pensar, creer, actuar, informar, o simplemente hacer lo que nos venga en gana en la mayoría de los ámbitos que rodean nuestras vidas.Y cómo no en el de la TCI también.
  • Después de esta "declaración de principios" me viene a la cabeza otro concepto más problemático y que podría llevarnos un blog entero hablar sobre él: la Sociología.
    Está claro que desde un punto de vista sociológico un concepto puede tener diferentes significados y significantes. Lo propiamente importante no es la definición en sí del concepto, sino la  idea que nuestro cerebro interpreta del mismo. Lo explicaré con un concepto simple: Dios.
    ¿Qué concepto tiene usted de Dios? Aquí ya surge una subclase dependiendo de si usted es una persona creyente, atea o agnóstica. Vayamos un paso más: ¿En qué país-cultura vive usted? Independientemente de si es nacional o se ha criado en un país con una religión preponderante X tendrá una visión concreta. Demos otro paso más ¿Qué nivel de desarrollo democrático y económico tiene su país? Otro paso más ¿Qué nivel formativo posee usted? Otro más ¿Qué acceso a la información posee? Otro ¿Qué capacidad de discernimiento y autocrítica posee? Como puede ver es un pozo sin fondo de cuestiones. Y se preguntará ¿A donde quiere llegar el de CantabriaTCI con toda esta parrafada? Le/a respondo en el punto siguiente.
  • Hace tiempo que soy un espectador atónito ante la proliferación de infinidad de grupos de ¿investigación? que se dedican en sus ratos de ocio al apasionante mundo de la investigación paranormal. A priori, y como he comentado en los puntos anteriores, tienen todo el derecho del mundo a hacerlo ¡faltaría más! Pero falla algo que también hemos comentado : el método.
    Como decía entre otros Amorós, la parapsicología no es ciencia. ¿No es ciencia? Pues la verdad es que no, ya que no cumple los requisitos que impone el método científico para serlo. Por lo tanto nos movemos en un vacío científico que,evidentemente, es un lastre a la hora de investigar. Esto los experimentadores lo tenemos totalmente claro. Nunca podremos ir con nuestras parafonías como una muestra siginificativa de algo porque,repito, no se ajusta a los cánones preestablecidos por la ciencia para ser merecedores de este calificativo.
    En cambio, estos grupos (individuales y colectivos) continúan haciendo sus experimentaciones legítimas obsesionados por la casa abandonada de turno, el hospital ruinoso en medio de las estepas de nuestro país, el castillo medieval de la provincia de no sé donde, y el cementerio de sus respectivas localidades. ¿Es eso investigación? Depende. Además usted podrá decir: ¡Pero si tú también lo has hecho! Y sí, por supuesto que lo he hecho (y lo haré) pero con ciertos matices que explico a continuación.
  • No me cansaré de decir que la práctica actual de la fenomenología parafónica se hace en el laboratorio que cada uno de nosotros poseamos. Éste obviamente podrá ser más o menos desarrollado dependiendo de nuestras capacidades tanto económicas como formativas.
    Aún así, si nos decidimos por el trabajo de campo (en mi caso hoy por hoy es puntual) hay que tomar ciertas precauciones que , en principio, el 99 % de estos ¿experimentadores? no hacen.
  • Primero ¿qué obsesión existe en ir a las dos de la mañana a un edificio medio en ruinas? ¿no se puede hacer esa experimentación a las cinco de la tarde? ¿acaso hay que recurrir a horas intempestivas para grabar? Ya comenté que algunos investigadores afirman que las horas nocturnas son más propicias para grabar, sobre todo por ser horarios en los que la actividad cotidiana con su correspondiente ruido son menores. Incluso el formidable Sinesio Darnell afirmaba la no existencia del llamado "ruido molecular" existente durante las horas diurnas. Aún así he de decir que prácticamente la totalidad de mis registros han sido registrados a plena luz del día por lo tanto veo innecesario tener que esperar a esas horas.
  • He observado que la mayoría de estos grupos usan soportes de grabación incompatibles para una observancia seria y metódica de fenomenología TCI. Al menos, bajo mi opinión, un señor que graba con un teléfono móvil, con su Iphone demuestra que no sabe demasiado bien qué está haciendo. Habría que sumar la infinidad de apps disponibles para la ejecución de esta práctica como podría ser la famosa Ghost Box, Spirit Box y demás aplicaciones 100 % desaconsejables. ¡Señores! Eso no es experimentación parafónica.
  • En lo que a aparatos se refiere he observado como usan infinidad de utensilios que, aparte de ser carísimos, estoy convencido que no saben como se usan ni muchísimo menos son conocedores de los procedimientos físicos básicos que interfieren en su uso. Los famosos detectores de carga electromagnética salen en cualquier vídeo de estos grupos pero ¿saben realmente que están midiendo? ¿conocen los baremos establecidos para poder catalogar los resultados? Lamentablemente la respuesta en la mayoría de los casos es no. Con esto no asevero estar en contra de su uso, todo lo contrario, pero para muestra voy a poner un ejemplo que me ocurrió en una ocasión. Me encontraba intentando elaborar un trabajo de campo en un sanatorio abandonado que tiene la característica de ser una isla. Llevaba un medidor electromagnético y en un momento de la grabación comenzó a sonar y a encenderse las luces de una manera ilógica. ¡Bien! Este dato podría interpretarse de dos maneras: o estamos rodeados de entidades-fantasmas-muertos-criaturas del Hades, o bien, podría ser que estuviese cerca de algún foco que propiciase la emisión de estas ondas. Siento informarle que fue esto último, ya que estaba justo debajo de lo que antiguamente fue el cuarto destinado a la recepción tanto de radio como de telefonía y aunque ya no estaba en uso, los materiales que la conformaban propiciaba que el detector de ondas electromagnéticas pitase como si estuviese poseído. Lo mismo ocurrió además con los micrófonos. ¿Conclusión? Ningún registro parafónico fue captado ese día. Ante cualquier incidencia no controlable en la sesión de grabación los resultados son desechados (y en el trabajo de campo suelen ser la grandísima mayoría).
  • Quiero hacer aquí una aclaración. A menudo algunos de ustedes me han preguntado mi opinión sobre la Spirit Box. ¿Qué es realmente este aparato? Es ni más ni menos que
    una radio (generalmente de mala calidad fabricada en China) que está sintonizada de tal forma que emite un barrido de frecuencia, generalmente en AM y FM. Si usted busca en google observará infinidad de ¿experimentaciones? en las que se usa este artilugio que, supuestamente, nos permite comunicarnos con el más allá. Usualmente se incorpora a un
    altavoz para recibir más claras las comunicaciones. ¿Fiabilidad? Ninguna. Primeramente con el método de transradio no se suele trabajar en FM ni AM, sino que se usan otro tipo de ondas cortas en frecuencias muchísimo más altas que las usadas por este transistor, repito, de extremada mala calidad y con un precio totalmente desorbitado (creo que en España cuesta alrededor de 80 €-110 $). Existe también la opción de "fabricar" una casera (generalmente eliminando una pequeña pletina que posee la radio mediante la que se obtiene el escaneo de frecuencias) aunque me han comentado que lo único que conseguiremos será destrozar la radio y los resultados son nulos. Por esa regla ¿de qué sirve el trabajo e investigación durante décadas de auténticas personalidades si podemos contactar por medio de una radio modificada de más que dudosa fiabilidad? Medítelo.
  • Recientemente visualicé cual película de ciencia ficción un trabajo elaborado por un grupo español en el que, como siempre, el lugar elegido era un antiguo edificio del que ahora mismo desconozco su uso. En un momento de la grabación de dicho documental se observa como comienzan a caer piedras del tejado. ¡Ni Spielberg habría hecho algo parecido! Por supuesto este resultado fue interpretado como algo completamente paranormal por estos señores,
  • Hace unos días visualizo otro equipo de investigación español formado por un buen número de personas a altas horas de la madrugada en un hospital abandonado. Nuevamente, utilizando las apps antes mencionadas y el Spirit Box interpretaban cada treinta segundos impactantes psicofonías. ¿Esto es investigación? Desde mi punto de vista no. Y ni que decir tiene del uso de los detectores de movimiento accesibles por unos 10 € en cualquier centro comercial de nuestro país. ¿Esto es serio? Definitivamente no.

  • Con todo esto lo que quiero decir es que necesitamos un método. Hace tiempo que vengo hablando con ciertos colegas de experimentación sobre la necesidad de plasmar una metodología clara y precisa para poder cotejar datos y compartirlos entre nosotros. No podemos hacer circos. No podemos dar por válida cualquier cosa. No podemos investigar el fenómeno parafónico con una radio que en cualquier chino cuesta cinco euros, no podemos elucubrar sin fundamento, y desde luego no podemos fastidiar a la gente que realmente nos implicamos en este tema.
    En ningún momento quiero ser clasista. No se exige a nadie que sea catedrático de física, ni mucho menos tener una carrera universitaria. Lo que se exige, únicamente, es seriedad. Si usted no posee conocimientos técnicos es tan fácil como buscar las fuentes de información y estudiar. Si, ha oído bien, estudiar, informarse, preguntar, tener inquietud por conocer desde un punto de vista objetivo.
    Yo no tengo conocimientos científicos, es más, los pocos que tenía se me olvidaron hace años. Soy filólogo, una persona letrada o instruida en el conocimiento y estudio de la lengua y su literatura ( en este caso la española puesto que soy hispanista), pero esto no me ha impedido formarme y dedicar horas de estudio a la física del sonido, a la física electrónica, al conocimiento de propagación de ondas, a conocer como funciona la radiofonía, y sobre todo a aprender como funciona nuestra mente.
    Repito, no es una cuestión de estudio, es una cuestión de ser coherente y tener ganas de aprender.

  • Ya para terminar quiero recalcar que no escribo esta parrafada para arremeter contra los intrusos que se meten a esto sin saber muy bien cómo o para qué. Escribo esto para que usted, que me lee y sigue mis trabajos, tenga la capacidad analítica apropiada para discernir lo que es trabajo serio y lo que es pasatiempo o sensacionalismo.
    Hay una cosa que tengo clara desde el primer día que empecé en este mundo de la TCI: jamás, he incido, JAMÁS haré amarillismo con un tema que me parece extremadamente serio.
    Espero que usted también lo haga.

6 comentarios:

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  2. Muy buen artículo. Cómo escéptico hice una investigación sobre la Ghost Box, después de los increíbles resultados de Steve Huff. La verdad es que pensaba que la explicación serías más sencilla. Aquí mi informe: http://vocesparanormales.blogspot.com.es/p/presentacion.html

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  3. Artículo muy crítico, pero que recalca algunos asuntos básicos al querer convertirse en experimentador en el campo de las "Inclusiones Psicofónicas", como yo las llamo.
    La base de todo esto es que el fenómeno existe, es real, cualquiera lo puede comprobar.
    Respecto a los lugares dónde realizar las experiencias, estoy en desacuerdo con ir a lugares -truculentos- por llamarlos de alguna manera, ya que igual se obtienen inclusiones en la comodidad del hogar.
    Nunca he ido a grabar en esos lugares, todo lo hago en mi casa, con mi computadora, grabador digital, antes usaba uno de cassettes, y en el caso de las psicoimágenes, con mi cámara.
    Le felicito por el artículo y a los que quieran oir y mirar mi trabajo en estas lides, les dejo mi blog:
    jrmarklin1.blogspot.com

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    1. Jr Marklin, antes de nada agradecerle su comentario y como no desearle unas buenas fiestas.
      Si relee lo que escribo podrá comprobar como coincido con usted en lo referente al lugar de grabación; es una evidencia constatable el hecho de que no es necesario ir a lugares "truculentos". Justamente es lo que intento dejar siempre claro a la hora de informar sobre la metodología de la TCI.
      En cuanto tenga un rato me pasaré por su blog a echarle una ojeada.
      Y como siempre, mil gracias por su aportación.

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    2. En cuanto a estandarizar un modelo de investigación, creo que sería lo ideal para el avance de la TCI como para-ciencia

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  4. Me ha encantado este blog. Estoy a punto de dar el salto a experimentar con radio ya que con grabadora he obtenido buenos resultados. He visto que hace varios años que no hay entradas en este blog, sigue en activo? Tengo algunas dudas acerca de qué tipo de radio sería mejor para empezar. Gracias.
    Ana.

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